De mí

Sábado azul, lleno de calor, lleno de verde, lleno de pájaros en el patio, lleno de una suave brisa que aparece cuando cae la tarde...
En la distancia los amigos y la familia que se extrañan como nunca.  El vivir lejos me ha enseñando muchas formas de hacerme los días más cortos o más largos, de inventarme mañanas y noches, de seguir disfrutando de lo sencillo, de lo simple y bonito, de lo puro, de lo cotidiano.... aunque esta cotidianidad sea una que muchas veces la sienta ajena.... Cada día en la distancia busco una manera de re-contrarme y de arraigarme cada vez más a lo que siento mío... Pero tambien me enfrenta a la realidad que de alguna manera u otra debo y quiero seguir  aprendiendo a aceptarla, a tolerarla y a camuflarme en ella.... eso si, sin perder mi esencia.  Una esencia que  a través de los años me he dado cuenta que está compuesta de raíces, historias, gustos, debilidades, fortalezas, miedos, alegrías, verdades..... y que continúa creciendo y se hace más fuerte.